23 de enero de 2012

Reflejada


La magia de algunas imágenes reside a veces en un simple gesto. Cuando el reflejo parece más real que la realidad misma, nos sumerge en ese mundo paralelo del "otro lado" donde las nubes en el suelo nos parecen abismos, las montañas aparecen invertidas y los objetos levitan suspendidos...

2 comentarios:

Israel dijo...

Dices: "donde las nubes en el suelo nos parecen abismos, las montañas aparecen invertidas y los objetos levitan suspendidos..."
Así se ve la Tierra y el universo desde la Luna, yo no he estado, pero me lo han contado.
Todas las mañanas cuando me levanto y me paro frente al espejo, mi otro yo, sólo con la mirada me dice: -Vuelve a la cama. Y todas las noches, con el mismo ritual me repite: -¿Por qué te has levantado?

Pero me da igual lo que diga, no confío demasiado en él.

Me gusta mucho la fotografía, Un saludo.

francesca dijo...

Haces bien, los reflejos son engañosos y a través de ellos los "alter ego" nos acechan y nos tientan.Yo tengo uno que en la luna tampoco ha estado pero es bastante "marciano".
En Bomarzo el diablo se le aparece 2 veces a Pier Francesco Orsini, en el espejo y en reflejo de una cerámica.Buscar la eternidad es lo que tiene...
Saludos