4 de julio de 2011

Casas



2 comentarios:

Israel dijo...

Hola, comparando ambas fotografías no se me ocurre nada mejor que citar al Conde de Volney.

-Y ahora ¿qué ha quedado de esta poderosa ciudad? Un fúnebre esqueleto. ¿Qué de esta vasta dominación? Una oscura y vana memoria. A la estrepitosa concurrencia que bajo de estos pórticos acudía, ha seguido la soledad de la muerte. Al murmullo de las plazas públicas ha sucedido el silencio de los sepulcros.

"Las ruinas de Palmira".
Saludos.

francesca dijo...

Hola Israel,bonito comentario.
Las ruinas materializan el paso del tiempo algo que me obsesiona.